Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Elena “N” a sus 17 años dio a luz a su primera hija, sin embargo, los abusos que ella tuvo durante el embarazo, ahora le han cobrado factura. Su bebé nació con problemas gastrointestinales severos y problemas respiratorios.

Comentó que en los primeros meses de embarazo desconocía su estado y continuó acudiendo a fiestas con sus amigos, fumaba de manera habitual y por lo menos una vez a la semana tomaba bebidas alcohólicas.

Cuando supo que había quedado embarazada el remordimiento llegó, sabía que esos primeros meses eran fundamentales para el desarrollo de su bebé, cuando se realizó su primer ultrasonido le dijeron que su embarazo era de riesgo.

Medicamentos contraindicados en el embarazo 

El neonatólogo Horacio Nolasco Martínez, explicó que este tipo de casos es más común en mujeres con embarazos precoces, esto debido a que no tienen el seguimiento adecuado durante la gestación.

Dijo que medicamentos como desinflamatorios, analgésicos, antibióticos, están contraindicados para estas pacientes, debido a las complicaciones que puede haber en el bebé como problemas en el sistema nervioso, malformaciones, baja talla, problemas en la piel, gastrointestinales entre otros más.

El síndrome fetal-alcohol 

Habló del síndrome fetal-alcohol, los niños presentan daños neurológicos severos. Con el tabaquismo los niños presentan  hasta 40% más de riesgo de problemas en el desarrollo neurológico, y también hace más probable la obesidad.

La Universidad Iowa en Estados Unidos, explicó que el consumo de cigarros durante el embarazo aumentará la probabilidad de que sufran problemas en su desarrollo entre los tres y los 24 meses de edad.

Daños irreversibles 

Estos errores de las madres generan daños que la mayoría de las veces no son corregibles y el tratamiento para el bebé será sólo para aminorar el daño.

Nolasco Martínez comentó que cuando la futura madre consume ciertos medicamentos y abusa de ellos durante los primeros meses de gestación, al nacimiento los bebés presentarán problemas gastrointestinales, suelen estar más irritables, presentan diarreas frecuentes, y por ello la recomendación de que por lo menos una vez al mes se acuda a revisión y a partir de la semana 34 sea cada semana para evitar complicaciones.