Miles de quintanarroenses cometen un delito de maltrato animal sin darse cuenta, al tener amarrado a sus perros o dejarlos en las azoteas de las casas sin protección durante horas, lo que es sancionado con multas de hasta 8 mil pesos y hasta dos meses de cárcel.

Así lo declaró Óscar Morfín Hernández, de la asociación civil Huellitas Quintana Roo, quien explicó que la Ley de Bienestar y Protección Animal del Estado prohíbe tener perros atados por más de seis horas, aunque estuviera bien alimentado, con buenas condiciones higiénico-sanitarias, con refugio de las inclemencias del tiempo y asistencia veterinaria.

“Aún ningún Ayuntamiento, a excepción del de Benito Juárez, contempla esta conducta como delito, sino como una falta administrativa con multa máxima de entre 500 a mil 800 pesos. Pero la legislación estatal es clara al respecto, y es la realmente vigente”.

Sin embargo, destaca que los trabajadores de los Centros de Bienestar Animal municipales no tienen conocimiento de este tema, por lo que se niegan a atender este tipo de denuncias, cuando la Ley los obliga a hacerlo.

Cita que tan sólo en Playa del Carmen y Chetumal, diversas asociaciones han presentado en el último año más de 300 denuncias con pruebas que evidencian el mal estado en el que se encuentran los animales por estar amarrados o abandonados en la azotea con el calor extremo, pero el problema de la capacitación de los funcionarios provoca que las demandas avancen de manera lenta o sean rechazadas.

En Solidaridad se han identificado a más de 4 mil viviendas donde tienen amarrados a sus mascotas durante horas, en ocasiones todo el día, con cuerda demasiado corta que genera atrofia muscular por falta de movilidad.

“Por supuesto que nuestro principal interés no es ir denunciando a cada ciudadano que encontramos cometiendo este delito; sino concienciar a la población. Por eso primero tratamos de dialogar con el dueño para que entienda el daño que le hace a sus animales cuando los amarra durante tanto tiempo”.

Añade que la mayoría de los propietarios de los canes entiende la situación y trata de disponer un mejor lugar a sus mascotas. Cuando se niegan argumentando que su perro es un método de seguridad y no un ser vivo, es que interponen la denuncia.

Hasta el momento han interpuesto 17 demandas en Playa del Carmen, pero ninguna ha avanzado debido a que en la Fiscalía General del Estado aún no se cuenta con el protocolo y la capacitación de los funcionarios para atender este tipo de denuncias.

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