Itzel Chan/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El valor de las maderas que son cultivadas en Quintana Roo coloca a la entidad en el primer lugar por tener la mejor calidad en especies y por poseer zonas prioritarias para el desarrollo forestal comunitario, sin embargo, ocupa el último lugar a nivel nacional en capacidad para realizar actividades agropecuarias, en elegir las áreas adecuadas en forestación y por ser vulnerable a incendios.

El Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) realizó recientemente el estudio denominado Índice de Competitividad Estatal, en el que destaca la entidad por concentrar importantes especies de árboles como cedro rojo, caoba, zapote, los cuales son aprovechados para elaborar muebles finos, pero al mismo tiempo ocupa el lugar 31 por no abrir el abanico de actividades agropecuarias y no asignar zonas adecuadas para sembrar más árboles.

Para Rafael León Negrete, gerente estatal de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), una de las mayores debilidades es la pérdida de selva, pero su fortaleza es ser uno de los Estados con mayor productividad tanto por empleado, como por empresa, ya que al año producen cerca de cuatro millones de metros cúbicos que son exportados al extranjero.

El Imco posicionó a Quintana Roo de manera general en un nivel medio, porque la pérdida de 57% de sus selvas primarias entre 1976 y 2008 le restó puntuación, a diferencia de Aguascalientes, Estado en el que han conservado el área de bosques, lo que lo posiciona en un nivel medio-alto. En el potencial de aprovechamiento forestal, la entidad ocupa el lugar 12. Tiene importantes retos en el área de plantaciones forestales comerciales y de manejo forestal maderable. En cuanto a sofisticación de producción, se ubica en la novena posición.

Entre los principales retos del Estado está enfrentar el peligro de inundaciones, lo que hace perder aprovechamiento y producción.