Stephani Blanco/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Tres municipios de Quintana Roo colocan a la entidad como una de las 21 que más deben de acuerdo con una evaluación de las cuatro calificadoras de riesgo en México, según análisis de la firma de consultoría Aregional. 

Para realizar el análisis, las cuatro agencias de riesgo autorizadas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores: Fitch Ratings, HR Ratings, Moodys Investors Service y Standard Poors realizaron en 2012, 205 evaluaciones a 118 municipios de las que se desprenden una calificación crediticia baja a Benito Juárez, Othón  P. Blanco y Cozumel. 

Para el municipio de Benito Juárez, Fitch calificó con BBB-. Anteriormente contaba con una Perspectiva Crediticia Negativa (PCN) y al cierre del 2012, en su último análisis,  le dio una Perspectiva Crediticia Estable (PCE). A noviembre del 2012, Ficht en su análisis de actualización del municipio de Benito Juárez, estableció que la deuda ascendía a 1.3 millones de pesos. Para realizar el cambio de negativa a estable, tomó en cuenta la liquidación que hizo el Ayuntamiento gobernado por Julián Ricalde Magaña, en enero del 2012, de112.3 millones de pesos al Fondo Nacional de Habitaciones Populares (Fonhapo).

En cuanto a Othón P Blanco, gobernado por Carlos Mario Villanueva Tenorio, Fitch otorgó en su análisis de actualización la calificación de BBB- con PCN. El descenso fue el resultado de un incumplimiento en el pago de  intereses y capital de cadenas productivas por 35 millones de pesos. A mediados del  2012, la deuda del municipio había ascendido a 248 millones pesos, a causa de un crédito por 130 millones de pesos.

En cuanto a Cozumel, gobernado por Aurelio Omar Joaquín González, la agencia HR Ratings de dio una calificación de BBB estable, ya que ofrece moderada seguridad para el pago oportuno de obligaciones de deuda, pues el estado presentó un incremento en sus ingresos propios, en promedio de 14.8%, desde el 2008. Al cierre del 2011, los ingresos propios fueron de 24.5 millones de pesos. 

El su análisis Aregional menciona los elementos tomados en cuenta para la calificación a los tres municipios: su desequilibrio financiero y el endeudamiento contratado, así como los altos costos operativos que afectan la flexibilidad presupuestal, y la capacidad para cumplir con sus compromisos.