La violencia parece estar apoderándose del estado de Guerrero en lo que va del mes de octubre, pues esta semana se reportó que un joven de 17 años fue hallado decapitado en el municipio de Teloloapan.

Las autoridades de la Fiscalía General del Estado informaron que esta tragedia tuvo lugar ayer, martes 8 de octubre.

La víctima fue identificada como Juan Daniel y presuntamente, fue secuestrado el pasado domingo después de que un comando irrumpió en el mercado municipal y mató a balazos a dos mujeres y a un hombre.

De acuerdo con versiones oficiales, el joven, quien es hijo de un carnicero, fue encontrado en la carretera federal Teloloapan-Iguala y es familiar de las personas asesinadas en el mercado.

Lamentablemente, Guerrero enfrenta una dura realidad luego de que Alejandro Arcos Catalán, alcalde de Chilpancingo, al igual que el joven, fuera encontrado decapitado. Este acontecimiento dejó a los habitantes temerosos de que algo así pudiera pasar de nuevo.

El lunes 7 de octubre, un día después del hallazgo de Arcos, la comunidad de Chilpancingo se despidió de él una última vez.

Fue apenas ayer que pese al temor por la situación a nivel estatal, Gustavo Alarcón Herrera asumió el cargo de alcalde de Chilpancingo.

“El miedo es parte de un sentimiento encontrado, pero aquí estamos”, expresó Alarcón Herrera.

Mientras tanto, en el municipio de Olinalá, dos hombres que estaban acusados de dedicarse a actividades delictivas terminaron siendo calcinados por policías comunitarios.

Los sujetos fueron amarrados, golpeados y después les prendieron fuego en una plaza pública, al tiempo que sonaban las campanas de la iglesia para advertir sobre el hecho.

Cuando los cuerpos ardían, un grupo armado intentó rescatarlos y abrieron fuego contra las personas que se encontraban en la plaza y después huyeron.

Derivado de la inseguridad que prevalece en Teloloapan, la única empresa gasera que opera en ese municipio anunció la suspensión del servicio para proteger a sus trabajadores.

Con información de Reforma